Por Gisela Nis, MJIT Argentina. Cuánto habré escuchado esta hermosa frase del Padre Poveda, y cuánto me habrá alentado a seguir pese a las adversidades en el trabajo cotidiano. Pero creo que fue en Madrid donde realmente pude comprender plenamente y vivir el significado de "¿Quiénes son los más valientes, intrépidos, temerarios, arriesgados? Los jóvenes. ¿Quienes son lo que tienen ideales, los que se olvidan de sí? Los jóvenes".
Fue conmovedor experimentar la fuerza de los jóvenes cristianos, de cómo a pesar de ser todos de distintas nacionalidades y de hablar diferentes idiomas, lo que nos unía y permitía comunicarnos era la fe viva en Cristo.
En lo personal la JMJ significó mucho, me ayudó a renovar mi compromiso de fe y me permitió renovar las ganas de seguir al servicio de Cristo.
Algo que llevaré siempre en mis recuerdos fue el ver tantos jóvenes que viven el carisma de la Institución Teresiana, lo que nos hacía sabernos parte de esta idea apasionada. Creo que a todos nos movilizó hasta lo más profundo el encuentro en Los Negrales; poder conocer lo que en los demás países se hace gracias a la Institución, los jóvenes que están en la misma senda que nosotros, recorriendo un camino de fe común y las ganas de volver a encontrarse.
Al volver me he traído en mi maleta muchas experiencias, muchos magos, energía renovada y sobre todo muchas ganas de hacer más, de que este encuentro internacional de jóvenes de la IT se vuelva a repetir. Pero más que todo he vuelto con la certeza de que grandes cosas van a surgir de este hermoso encuentro porque somos jóvenes y todo lo podemos.
A los jóvenes de ACIT Joven España mi más grande recuerdo y cariño, gracias por abrirnos las puertas por brindar su tiempo y predisposición para con todos nosotros. Ojalá nos volvamos a ver todos en Rio 2013; pero sobre todo que continuemos avanzando juntos, trabajando codo a codo para que como hombres y mujeres de Dios seamos inconfundibles.
Fue conmovedor experimentar la fuerza de los jóvenes cristianos, de cómo a pesar de ser todos de distintas nacionalidades y de hablar diferentes idiomas, lo que nos unía y permitía comunicarnos era la fe viva en Cristo.
En lo personal la JMJ significó mucho, me ayudó a renovar mi compromiso de fe y me permitió renovar las ganas de seguir al servicio de Cristo.
Algo que llevaré siempre en mis recuerdos fue el ver tantos jóvenes que viven el carisma de la Institución Teresiana, lo que nos hacía sabernos parte de esta idea apasionada. Creo que a todos nos movilizó hasta lo más profundo el encuentro en Los Negrales; poder conocer lo que en los demás países se hace gracias a la Institución, los jóvenes que están en la misma senda que nosotros, recorriendo un camino de fe común y las ganas de volver a encontrarse.
Al volver me he traído en mi maleta muchas experiencias, muchos magos, energía renovada y sobre todo muchas ganas de hacer más, de que este encuentro internacional de jóvenes de la IT se vuelva a repetir. Pero más que todo he vuelto con la certeza de que grandes cosas van a surgir de este hermoso encuentro porque somos jóvenes y todo lo podemos.
A los jóvenes de ACIT Joven España mi más grande recuerdo y cariño, gracias por abrirnos las puertas por brindar su tiempo y predisposición para con todos nosotros. Ojalá nos volvamos a ver todos en Rio 2013; pero sobre todo que continuemos avanzando juntos, trabajando codo a codo para que como hombres y mujeres de Dios seamos inconfundibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario